Apertura y entusiasmo. El CDAN es un espacio vivo, abierto a la ciudad de Huesca y a sus visitantes, teniendo como eje principal el privilegiado entorno en el que se ubica como una prolongación pública de la ciudad.
Sensibilidad y creatividad. El CDAN es un punto de encuentro público para el juego social, la experimentación y la innovación que facilita nuevas formas de creatividad y capacidad de juicio crítico.
Participación y dinamismo. El CDAN es un lugar donde hacerse preguntas, en el que se invita al visitante a convertirse en colaborador activo de lo que sucede en el museo, ilusionándole, intentando generarle un movimiento afectivo y facilitándole su participación en las diferentes actividades culturales que se programan. Cada visitante que atraviesa la puerta de nuestro Centro nos da su confianza, nos da su tiempo y trabajamos para no defraudarle. Difundir el arte no es difundir la teoría, es difundir sensaciones, emociones y pasión.
Compromiso con la sociedad. El CDAN contribuye a aumentar el valor de la ciudad de Huesca y de su Comunidad Autónoma, destacando la calidad del paisaje y los elementos naturales que rodean a Huesca y estimulando la experiencia estética y la emoción de crecer a través del arte y la cultura en valores como la apertura, el respeto, la tolerancia, la igualdad y la diversidad.
Educación y Cultura. La educación en el CDAN es una prioridad, y por eso nuestro programa educativo, para todo tipo de público, tiene un protagonismo especial en nuestra programación anual. Nuestras actividades persiguen dos objetivos básicos: desarrollar una sensibilidad propia en relación al arte contemporáneo y acercar a nuestros visitantes a los discursos intelectuales de la práctica artística actual. El CDAN potencia la relación entre educación y cultura, explícitamente didáctica en unas ocasiones y sutil orientadora de los gustos en otras, creando públicos nuevos y fomentando que el conocimiento multiplique las posibilidades de disfrute de las artes.
Gestión responsable con capacidad de adaptación. Una gestión con una clara vocación de “revolución permanente”, flexibilidad y rápida capacidad de reacción que utiliza de la manera más eficiente los recursos disponibles para la obtención de los objetivos encomendados en sus estatutos, acordes con la esencia de servicio público en la que se encuadra esta institución, adaptados a nuestro espacio y coherentes con las necesidades de nuestros usuarios.
Colaboración institucional y empresarial. Apertura decidida a la colaboración con las instituciones, organizaciones, colectivos y empresas que se supone comparten con nosotros la preocupación por la difusión de las artes. Somos de la opinión de que es mejor caminar juntos en proyectos comunes, pues significa unir voluntades y combinar los recursos públicos con el patrocinio privado para estimular desde las instituciones la creación contemporánea además de que estas alianzas suponen un mayor prestigio y proyección tanto para los proyectos como para quienes los crean.
Territorialidad. Siendo la máxima “pensar globalmente, actuar localmente” del doctor y humanista americano René Jules Dubos, el CDAN trabaja con una mayor preocupación por lo territorial, lo autóctono tanto del público como de los creadores, sin descuidar que esta tendencia no haga peligrar la universalidad que debe caracterizar a lo cultural.
Transversalidad de las artes. El CDAN quiere que las manifestaciones creativas, las artes plásticas, la música, el cine, la danza, etc. se interrelacionen. No tanto como la transmisión de conocimiento entre disciplinas, sino como disposición para la acción conjunta, diferentes enfoques y miradas dentro de unas propuestas o ideas que en su concreción y precisión mejoren el movimiento cotidiano de la sociedad. Se trata de testimoniar un conjunto de experiencias tanto creadoras como pedagógicas, de las cuales puedan extraerse ejemplos y modos de acercarse a la enseñanza específica del arte inter y transdisciplinario.
Mediación entre la creación, el público y el consumo cultural. El CDAN, como canal de comunicación entre ellos, desarrolla un trabajo artístico y cultural que lo inserta en una estrategia social y territorial para hacer viable el proyecto en sus dimensiones económica, formativa-educativa y política.
Partiendo del necesario aprovechar el camino ya recorrido, no podemos ni queremos renunciar a abrir nuevos caminos que contribuyan al desarrollo del sector artístico y en general del desarrollo de Aragón y bienestar de los aragoneses. Así, el objetivo final cara al futuro se puede resumir en favorecer la calidad y cantidad de la oferta cultural de nuestra institución, prestando una atención especial a la intercomunicación entre artistas locales, nacionales e internacionales y la transversalidad entre las artes, e incrementar el número y la satisfacción de los visitantes beneficiarios y, con ello, el reconocimiento público de nuestra institución como impulsora activa de la cultura.